A medida que los niños comienzan a crecer y a desarrollarse, también lo hacen sus dientes. Con la caída de los dientes de leche y la aparición de las piezas definitivas, comienzan también a ser visibles los primeros signos que pueden avisar del sufrimiento de patologías, las cuales necesitarán ser corregidas con ortodoncia para evitar problemas mayores cuando el paciente sea adulto.
Sin embargo, muchos padres se encuentran frente a la tesitura de no saber cuándo es el mejor momento para acudir al dentista con sus hijos, ya que desconocen cuáles son los tiempos indicados para el uso de la ortodoncia o si es realmente necesario.
El uso de ortodoncia infantil o de cualquier otro aparato que sea necesario colocar en niños, será determinado por un dentista. Los profesionales realizarán un estudio personalizado de cada niño, para saber qué patologías pueden sufrir en su salud bucodental y cómo corregirlas. Además, nos asesorarán sobre cuándo es el momento indicado para que el niño comience a llevar ortodoncia y durante cuánto tiempo será necesario que lo haga.
¿Qué es la ortodoncia infantil y qué tipos existen?
La ortodoncia infantil, al igual que la que se aplica en adultos, es un tratamiento dental que se utiliza con la finalidad de corregir patologías dentales: tanto funcionales como estéticas. Estos problemas serán corregidos gracias al aparato y se evitará que el paciente sufra otras patologías más graves como consecuencia cuando sea adulto.
Generalmente, los problemas dentales en niños no son fáciles de detectar ni existen unos tiempos determinados, puesto que cada uno de ellos tendrá un ritmo de crecimiento distinto, lo que hará que las mismas patologías se puedan diferenciar a edades completamente distintas.
Lo más frecuente es que en torno a los seis años de edad, a los niños empiecen a salirse los primeros molares y, por tanto, las piezas dentales definitivas con la caída de los dientes de leche.
Es recomendable que, en torno a los seis años, los padres acudan con el niño al dentista ya que a partir de esta edad ya se podrán determinar algunos problemas: prever si habrá falta de espacio para todas las piezas dentales, problemas relacionados con el desarrollo de los huesos maxilares, con la mordida, etc.
En el caso de que el niño vaya a necesitar ortodoncia infantil, el dentista recomendará la más apropiada para cada caso, ya que existen diferentes tipos:
- Ortodoncia interceptiva (aparatos removibles o fijos): Comúnmente conocidos como aparatos “de quitar y poner” son los más utilizados en niños que aún cuentan con algunos dientes de leche. Se utilizan en pacientes que han comenzado el recambio dentario y se necesita corregir el crecimiento de sus husos maxilares para su correcta interrelación. Este tipo de aparatología no es sinónimo de no tener que realizar una aparatología correctora cuando salgan los dientes definitivos. Tienen un uso muy sencillo y permite a los niños familiarizarse rápidamente con ellos.
La ortodoncia removible se compone de unas placas fabricadas con materiales acrílicos, las cuales se sostienen en la arcada dental con unos ganchos metálicos que permitirán su sujeción.
La ortodoncia fija pude ser de distintos materiales ya sean metálicos o de resina que gracias a un cemento dental será utilizado durante las 24 horas del día.
Lo más recomendable en el caso de las ortodoncias interceptivas, es que los niños las usen el máximo número de horas posibles, ya que solo así se asegura su efectividad. Pero los padres deberán vigilar el uso que los niños hacen un uso correcto del aparato y si realmente están cumpliendo con las pautas dictadas por el ortodoncista.
- Ortodoncia fija (Brackets): Los brackets son el aparato de ortodoncia más conocido entre la población. Se utilizará en aquellos niños que cuenten ya con sus piezas dentales definitivas o en aquellos que han estado usando aparato removible previamente, para garantizar unos resultados definitivos. Dentro de la ortodoncia fija podemos encontrar: Brackets metálicos, de zafiro, de porcelana o cerámicos. El ortodoncista podrá aconsejar los más apropiados para cada caso.
¿Cuándo es el mejor momento para colocar ortodoncia en niños?
Como se ha citado anteriormente, los niños comienzan a experimentar la caída de los dientes de leche y la llegada de las primeras piezas dentales definitivas, en torno a los 6 años. Sin embargo, hasta los 12 años aproximadamente no contarán con todas las piezas definitivas.
Dependerá de cada caso y de las patologías que el niño sufra en torno a su salud bucodental. En algunos casos se recomienda esperar hasta los doce años para colocar una ortodoncia fija. Sin embargo, si en un análisis previo a partir de los siete años ya se detectan problemas, es recomendable que el niño comience a utilizar una ortodoncia interceptiva, ya que va acostumbrando al paciente a su uso y será mucho más fácil el uso de una ortodoncia fija en el futuro.
Si quieres conocer más información sobre ortodoncia infantil, ¡no dudes en contactarnos! En RL Dental somos expertos en ortodoncia para niños y estaremos encantados de resolver todas tus dudas.